Muchas personas deciden tatuarse en verano, ya que es la época perfecta para lucirlos. Sin embargo, también es el momento más peligroso, ya que los tatuajes están más desprotegidos frente a roces, sustancias y bacterias, y el riesgo de infección es alto si no se toman las debidas precauciones. Y esto incluye tanto a los tatuajes grandes como a los pequeños, como un simple diseño en el tobillo o en el hombro.
Dry Brushing: Cepillado en seco anticelulitis
¿Por qué? Un tatuaje es muy similar a una pequeña intervención quirúrgica en la piel y, por eso, deben llevarse a cabo todas los cuidados.
A continuación, las medidas que debés llevar a cabo para protegerlos:
Ácido Hialurónico: Todo sobre los fillers
Cómo cuidar una piel tatuada:
Primero, antes de realizar el tattoo es muy importante informarse bien y confirmar que el centro elegido cumpla las normativas de higiene y protocolos adecuados.
Maquillaje: Tendencias otoño - invierno
Pedir antes una prueba de la tinta en una zona poco visible, en especial si se tienen enfermedades de la piel o se quieren utilizar determinados colores.
Cuidado con el color rojo. La gran mayoría de los tatuajes que causan problemas son de ese tono. Por lo tanto, si se va a utilizar tinta roja es especialmente recomendable realizar la prueba de alergia al menos dos semanas antes de hacerse el tatuaje definitivo.
Guerra final contra la caspa
Hay estudios que señalan que las tintas llevan sustancias como plomo, níquel o arsénico (en pequeñas cantidades) que son tóxicas y pueden resultar potencialmente cancerígenas. Al hacer el tatuaje, se produce una ruptura en la piel que puede desencadenar que la tinta penetre hasta capas más profundas.
Rosa mosqueta: Aliada de la belleza
De allí, se observó, que algunas moléculas de la tinta podrían viajar hasta los gánglios linfáticos y de allí al hígado donde podrían llegar a otros órganos del cuerpo y perjudicarlos. Cuanta más extensión de piel tatuada, más riesgo que eso ocurra. Se sigue investigando si la carga de estos metales pesados también se deposita sobre otros órganos y tejidos internos más lejanos. Estos datos permitirán evaluar los verdaderos riesgos para la salud asociados a los tatuajes en la piel.
Maquillaje de ojos según su color y forma
Stop al sol, el mar y la pileta:
Además de los cuidados mencionados, hay que tener presente que si te han hecho recientemente un tatuaje no podés bañarte en la playa o en la piscina, ni siquiera en la tuya. El tatuaje provoca heridas en la piel y el riesgo de infección es muy elevado.
Bálsamos labiales: Un infaltable ante el sol
Como mínimo, los 2 o 3 primeros días después de hacerte el tatuaje no es recomendable mojar la zona. Y para bañarse en piscinas, playas o ir a una sauna, deberían pasar al menos unas 2 semanas, recomiendan los especialistas.
Tampoco es conveniente tomar sol: se debe evitar la exposición directa de la zona tatuada durante los primeros 10-14 días y usar un fotoprotector alto.
Métodos de eliminación:
Antes un tatuaje era para siempre. Pero ahora, por suerte, si nos arrepentimos o nuestros gustos cambian, se los puede eliminar mediante láser, aunque los resultados pueden variar en función del tono de piel, las tintas utilizadas o el tamaño del tatuaje.
Por lo general, en las pieles más claras se eliminan mejor. Y en algunos centros avisan, por ejemplo, de que los colores verdes, marrón, azul claro, lila, blanco y amarillo dan más problemas a la hora de "borrarlos".
Por supuesto, siempre hay que ponerse en manos médicas expertas que sepan utilizar este tratamiento de manera adecuada, advierten en la Academia Española de Dermatología y Venereología.
Luego del tratamiento láser para eliminarlos se deben seguir precauciones especiales muy similares a las de una pequeña intervención, con métodos de asepsia y fotoprotección de la zona.
La cantidad de sesiones requeridas para borrar el tatuaje depende de distintos factores: la cantidad de tinta que se encuentre depositada en la piel, su calidad, la localización del tatuaje y por supuesto, el color. Normalmente los tatuajes amateur requieren menos sesiones que los profesionales. Los tribales son los que necesitan mayor cantidad de sesiones. En ningún caso, salvo alguna excepción, suelen ser menos que cinco sesiones con intervalos de dos meses entre sí, que es el tiempo que le lleva a la inmunidad remover el pigmento que se rompió como consecuencia del tratamiento.
Henna: ¿es más saludable?:
Los tatuajes de henna tienen mucho éxito porque se hacen, en un principio, con sustancias vegetales naturales e inofensivas y se van al cabo de 2-3 semanas con los lavados.
Sin embargo, la Academia Española de Dermatología y Venereología publicó un artículo en el que avisaba de que no siempre estos "falsos" tatuajes son tan inocuos como creemos.
Según esta academia, con frecuencia la henna se mezcla con sustancias tóxicas como la PPDA (parafenilendiamina), que en altas concentraciones pueden ser peligrosas para la salud. Este compuesto se utiliza para oscurecer el color natural de la henna y conseguir que permanezca más tiempo en la piel.
Por otro lado, la henna natural tiene un color entre marrón y rojizo y no suele provocar problemas. Pero si es más bien negra, evitarla, porque es probable que tenga este aditivo tóxico o algún derivado, que pueden causar reacciones alérgicas.
Ante un tattoo reciente:
Luego de realizar el tatuaje, el profesional debe proteger la zona con vaselina o pomada antibiótica y un apósito o film.
Al cabo de unas horas, podés retirar el vendaje y limpiar la zona suavemente con agua tibia y jabón hipoalergénico o de pH neutro, teniendo especial cuidado en no frotar ni rascar.
Secar con cuidado, dándote pequeños toques, con una toalla limpia, que no utilices para nada más.
Después, deberás ponerte la crema antiséptica y cicatrizante que te haya recomendado el profesional.
Evitar tocar el tatuaje y, si debés hacerlo, lavar las manos antes. Finalizado el periodo de curación, hidratar bien la zona tatuada siempre una vez limpia.
at Silvia Pardo
Comentarios