Muchas personas presentan dolores de cuello y columna y no son conscientes de su postura corporal incorrecta. Aunque atribuyen las molestias al estrés o cansancio, el problema tiene que ver con la forma en que manejan su cuerpo.
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Una mala postura con el cuerpo inclinado hacia delante o exageradamente derecho, dificulta la respiración y puede generar lumbalgia, escoliosis y lordosis (dos desviaciones de la columna); comprimir los órganos de la digestión y provocar molestias digestivas. Por este motivo, es importante tratar de mantenerse siempre erguido.
La postura correcta:
Es la que no se exagera o aumenta la curva lumbar, dorsal o cervical; es decir, se mantienen las curvas fisiológicas de la columna vertebral.
Cuello: se mantiene erguido.
Hombros: hacia abajo y hacia atrás en línea recta.
Tórax: se mantiene elevado para facilitar la respiración.
Abdominales: se contraen (este efecto aplana la zona).
Brazos: se cuelgan al costado del cuerpo y se achica la cintura.
Si se está parado:
Rodillas: se mantienen derechas para asegurar una parada más firme.
Pies: deben estar en forma paralela y el peso del cuerpo debe estar bien repartido entre ambos.
Si se está sentado:
Es muy importante que los isquiones (huesos localizados en los glúteos debajo de la cadera) estén bien apoyados sobre una superficie firme. Las caderas, rodillas y tobillos deben formar un ángulo recto para sostener todo el peso del cuerpo.
Qué hacer para estar erguidos:
Realizar actividad física y deportes porque permiten mantener un peso saludable. También son efectivos los ejercicios localizados para fortalecer la musculatura y mejorar la postura.
Mantener una buena alimentación también es importante, dado que las personas con sobrepeso tienden a torcer su cuerpo.
Dormir boca arriba o de costado. La posición boca abajo aumenta la curvatura lumbar y tensiona el cuello.
El bolso o cartera no debe ser muy pesado. Se calcula que aproximadamente tiene que tener un 10 por ciento del peso del cuerpo.
Usar un taco medio.
Actividades recomendadas:
Nadar: elonga y tonifica la musculatura de las piernas, brazos y espalda.
Yoga: permite restablecer la circulación energética del organismo. Otorga gran flexibilidad y relajación.
RPG (reeducación postural global): son ejercicios para elongar todas las cadenas musculares del cuerpo.
Danza: otorga estiramiento y flexibilidad corporal.
Eutonía: genera conciencia de la estructura ósea y de la superficie de contacto corporal, a través de movimientos lentos y pequeños.
Gimnasia: ejercicios localizados de tensión y estiramiento son efectivos para mantener la postura erguida.
at Redacción Mía
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