El ayurveda, es un sistema de medicina preventiva que se practica en la India desde hace más de 5000 años. Su principio básico es promover la integración de la mente, el cuerpo y el espíritu, para vivir de manera saludable, sosteniendo que la mente ejerce la influencia más profunda sobre el cuerpo. Por eso, el vernos libres de enfermedades y llevar una vida placentera, depende de que equilibremos nuestra propia conciencia, para poder extender esa armonía a todo el organismo.
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Desde siempre, la ciencia ayurvédica asoció la belleza con la longevidad y la entendió como el resultado del equilibrio interior, que se manifiesta en el estado de la piel. Es por eso que cada vez más, se conocen sus beneficios en la cosmética, y se proponen varias rutinas naturales para el cuidado del cuerpo, la belleza y el rejuvenecimiento del rostro.
Los doshas:
En el ayurveda, existen tres tipos biológicos para caracterizar el modo en que los cinco elementos de la naturaleza (éter, fuego, agua, tierra y aire), se manifiestan en cada persona.
Esos tipos son denominados doshas, y se conocen con los nombres de Vata, Pitta y Kapha.
Las personas con dosha predominante Vatason regidos por los elementos aire y éter. Generalmente son seres delgados y con tendencia al resecamiento del cabello y la piel. Necesitan cuidados especiales como la hidratación.
Los que poseen dosha predominante Pitta, son regidos por los elementos fuego y agua. Su biotipo corporal es de musculatura moderada. Su piel es sensible o mixta y precisa de cuidados diarios para mantener el equilibrio. Dentro de ellos, el más necesario es la nutrición de la piel y el cabello.
Aquellos con dosha predominante Kapha, son regidos por los elementos agua y tierra. Suelen ser personas con buena masa muscular y ósea. Tienen piel grasosa y gruesa y precisan de una tonificación astringente.
El cuidado de la piel según el dosha:
Durante el verano, la exposición inadecuada al sol y las altas temperaturas pueden provocar la deshidratación y fotoenvejecimiento de la piel. Utilizar protector solar factor alto, beber abundante agua, tomar duchas frías y comer más frutas y ensaladas es el consejo generalizado, pero ¿cómo proteger la piel de forma adecuada según cada dosha?
El médico y especialista en medicina ayurvédica de la Sri Sri Tattva School, José Harvey, brinda algunos consejos para mantenerla en equilibrio.
Según el especialista, las pieles con predominancia Vata deben aplicarse con frecuencia productos más cálidos y nutritivos, como aceites o cremas que contengan, por ejemplo, sésamo, karité o azafrán.
Por su parte, las pieles con el dosha Pitta dominante, antes de incorporar un producto deben primero observar la reacción de la piel en un área pequeña, ya que pueden tener predisposición a irritarse con facilidad.
Según Harvey, para este tipo de dermis es aconsejable el uso de productos ligeros y fríos, como por ejemplo, a base de coco, sándalo, rosas y almendras.
Por último, las pieles Kapha deben utilizar productos muy ligeros y lo más secos posible. El médico ayurvédico recomienda la utilización de polvos para la exfoliación y cosméticos a base de mostaza, aloe vera, porotos, garbanzos y lavanda.
“Lo más aconsejable, sobre todo en verano, es utilizar protector solar factor alto y evitar exponerse al sol porque los rayos UV dañan las células junto a su ADN. En caso de querer tomar sol, es aconsejable hacerlo antes de las 11 y después de las 16, y utilizar, además del protector solar, productos a base de coco u oliva naturales que ayudan a absorber la luz ultravioleta, hidratan y dan un color uniforme a la piel. También se pueden incorporar alimentos ricos en vitamina B que ayudan a conseguir un bronceado uniforme”, explica el especialista.
“Después de tomar sol, para hidratar nuevamente el cuerpo, recomiendo utilizar gel de aloe vera y aplicarlo directamente sobre la piel. También son aconsejables baños refrescantes y masajes con aceite de coco”, completa Harvey.
Automasajes ayurvédicos:
Consisten en una secuencia de profundos masajes aplicados en el rostro, que brindan lozanía y belleza a la piel. Para realizarlos hay que trabajar con las yemas de los dedos desde el centro de la frente y entre las cejas (hacia fuera).
Luego se va hacia el nacimiento del cabello, a ambos lados del rostro, y se masajea desde la línea central hacia afuera y hacia arriba. Posteriormente, se trabaja por debajo de los ojos y se sigue por las mejillas y por debajo de los labios.
Se finaliza masajeando la barbilla para subir por las mandíbulas. Debe durar aproximadamente 15 minutos y se aconseja hacerlos a diario, con aceites a temperatura corporal y de acuerdo a cada tipo de piel: para piel seca, tipo Vata, utilizar aceite de sésamo; para piel grasa, tipo Pitta, aceite de girasol o coco y para piel mixta, tipo Kapha, aceite de almendras o de oliva.
Aceite de sésamo: es uno de los más populares. Es pesado, dulce y generador de calor.
Aceite de coco: es dulce, ligero y refrescante. Tiene minerales y proteínas.
Aceite de almendras: es dulce y pesado. Proporciona calor y contiene proteínas, minerales, etc.
El secreto de los aceites:
Aceite Vata: preparado con ingredientes para otorgar tibieza, armonía y nutrición. Especial para sequedad y arrugas. Las personas en las que predomina Vata disfrutan de masajes con toques suaves, que brinden calor a una piel normalmente fría.
Aceite Pitta: preparado con ingredientes para otorgar calma, frescura, relajación y suavidad. Las personas Pitta disfrutan de un masaje firme, directo, con toques refrescantes.
Aceite Kapha: se prepara con ingredientes que sean refrescantes y astringentes. Las personas Kapha se benefician con masajes profundos, y estimulantes, pero con poca cantidad de aceite.
at Silvia Pardo
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