Es común que tanto los perros como los gatos tengan un aliento peculiar, pero cuando este se intensifica y se vuelve desagradable es posible que exista un problema que, de no tratarse a tiempo, `puede producir enfermedades. Normalmente la boca del animal contiene bacterias, pero si estas s reproducen rápidamente tiende a desencadenar una enfermedad periodontal, pudiendo afectar al hígado, riñón y corazón. Otro inconveniente es la formación de la placa dental que provoca dolor e interfiere con la alimentación.
Tos de las perreras, el mal de las guarderías
La limpieza de dientes previene este tipo de desenlaces; la misma debe iniciarse cuándo aún es un cachorro, ya que esto va a permitir educarlo correctamente para realizar el cepillado y las inspecciones bucales. Para entrenarlos, es necesario tocarles la boca con suavidad, sin sujetarla y cuando el acepte esta manipulación tranquilamente, es necesario recompensarlo con alguna comida que le guste. De a poco se acostumbrarán a aceptar que se les metan los dedos en la boca y es ese el momento ideal en que se debe comenzar a frotar los dientes con un cepillo suave, un dedal o un paño de algodón con dentífrico para mascotas. La tarea debe llevarse a cabo delicadamente para no lastimarlo ni asustarlo. Un masaje en las encías también contribuye a mantener sanos a los dientes, incluso se puede realizar colocándose un guante de látex. Esta rutina de 5 minutos al día es sumamente útil para prevenir muchos inconvenientes de salud.
No debe utilizarse productos para humanos, debido a que son perjudiciales para los animales, esto incluye la pasta dental.
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Actualmente existen en el mercado determinado elementos para facilitar la terea, entre ellos podemos encontrar pastas de sabor agradable que se aplican con un cepillo en forma de dedal, conlutorios en spray y una amplia variedad de galletitas y huesos que ayudan a prevenir y desgastar el sarro y fortalecer las encías.
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