La calle está cada vez más difícil, creo que todos notamos cómo aumenta la inseguridad, el acoso callejero, los femicidios, los asaltos u homicidios. Ante esta situación considero importante que todos tengamos la oportunidad de enfrentar el día a día sin miedo”, comenta Tamara Pons, la joven que tiene como lema en su página web “¡Basta de no saber si llegamos! Sentite libre y sin miedo con tu propio llavero". Una diseñadora gráfica devenida en emprendedora que creó Mamá llegué, su línea de llaveros en el que cada objeto cumple una función, ya sea "atacar para defenderse", dar una oportunidad de escapar o pedir auxilio.
Diferentes kits:
Entre los objetos que pueden componerlo se encuentran los siguientes:
Gas pimienta
Manopla en forma de gatito
Alarma audible hasta 300 metros
Linterna
Arma de defensa personal japonesa (kubotan)
Rompecristal y cortacinto
Tarjeta-navaja
Además, el kit viene con un pompón y una cinta decorativa de color a elección. “Armé siete modelos distintos que varían en precio desde $1800 a $4500, según los elementos que tenga cada uno, y doy la oportunidad de que lo armen de forma personalizada. Pueden elegir dentro de los elementos y colores que tenga disponible en el momento, o encargar si quieren un diseño en particular”, describe Tamara sobre el producto que vende en el local de estética de su madre. Los kits se pueden pedir a través de su cuenta de Instagram @Mamallegue, donde también se pueden ver los modelos, técnicas e instrucciones de uso.
“La función principal es hacerte sentir seguro, que vos cuentes con algo con lo que te puedas defender”, afirma Tami, como la apodan todos.
Cómo nació la idea Tamara cuenta que surgió durante las muchas horas que ella pasa circulando en la calle sola. Dice que cuando era una adolescente ya pensaba en estas cosas. “Me acuerdo de chica, caminando a casa desde el colegio con la llave agarrada lista por si en algún momento necesitaba defenderme”, relata.
En esa época empezó a automatizar el mensaje “mamá, llegué”, que le enviaba a su madre cada vez que llegaba a algún lugar. De esta forma comenzó con el emprendimiento para desde su lugar aportar mayor seguridad a todas esas mujeres que temen a la hora de salir del trabajo, del colegio, o de sus hogares y regresar a casa.
Este emprendimiento, que solo tiene un mes y medio de actividad, ya logró más de 14 mil seguidores en Instagram, casi 100 mil reproducciones en sus reels, y cientos de ventas de kits y elementos sueltos. “Me alegra ver que lo que creé llega a personas que sienten que lo necesitan, espero que logren sentirse libres de caminar solas y sin ese miedo constante a no volver”, concluye Tamara.
at Redacción Mía
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