Thursday 28 de March de 2024
SALUD | 03-04-2017 11:44

10 estrategias de relajación exprés

Vivimos en un mundo en el que estat al borde de un ataque de nervios es la contstante y no la excepción.

Olvidá eso de "no me puedo relajar, no tengo tiempo para ahacerlo". Y recordá siempre recordá recordar tus virtudes y exitos porque ¡todos los tenemos!

Acá vas a encontrar técnicas breves, fáciles, aptas para hacer en el escritorio de la oficina, tu cocina o en la puerta del colegio de tus hijos.

Respiración: contá las inhalaciones y las exhalaciones de forma pausada, centrando tu atención sólo en esa acción. Podés relajarte sin necesidad de levantarte del escritorio o mientras estás cocinando. Ejemplo de técnica de respiración: poné una mano debajo del ombligo, de manera que puedas sentir el movimiento mientras respirás. Inspirá, hace una pausa, contá hasta tres y seguí repitiendolo hasta un minuto.

Dormí una siesta de no más de media hora.

Automasaje: con los pulgares, hacé pequeños círculos alrededor de la base del cráneo. Seguí con el resto del cuero cabelludo con los dedos. Pasá a la cara, siempre con pequeños círculos con los pulgares, deteniéndote en las sienes, frente y músculos de la mandíbula.

Poné aromas: la menta, el eucalipto, la mandarina aportan vigor. La canela o la vainilla tranmisten sensación de calma. La lavada es muy relajante.

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Escuchá música tranquila aunque sea durante 10 minutos.

Cuando te sientas muy estresado o nervioso, buscá hacer una acción repetitiva. Puede ser caminar, barrer, yoga, tai-chi. Cualquier ejercicio lento.

Relajá la peor zona de tensión: los hombros. Dejá caer los brazoz a a mbos lados del cuerpo pesadamente. Ahora, inspirá y expira despacio. Cada vez que expires, tratá de relajar la zona un poco más.

Imagina una pared blanca. Buscá un lugar donde estés cómodo y sepas que no te van a moñestar. Cerrá los ojso y visualizá una pared blanca frente a vos, recreá ese color e imaginá la pared con todos sus detalles e imprefeciones.

Agregá avena a tu desayuno porque tiene propiedades relajantes.

Sonreí. Este gesto que puede parecer intrascendente transmite al cerebro un mensaje somilar a "todo va bien". Solo la mueca puede ayudarte a cambiar el estado de ánimo.

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