El eating clean (comer limpio) es una nueva propuesta alimenticia cuya idea central es que todos estemos muy atentos para dejar de lado los platos al paso y los productos pre-cocinados de modo de volver a la verdura, la fruta y
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los alimentos integrales.
El principio de esta propuesta es que el cuerpo sea alimentado a largo plazo con sustancias de alto valor nutritivo y no con calorías poco útiles. Para lograrlo, hay que
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volver a comprar simplemente verdura cruda y prestar atención al tipo de grasa que se emplea para elaborarlas.
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Algunos especialistas señalan, además, que esta propuesta, rica en fibras y en cereales integrales, genera más rápidamente una sensación de saciedad, con lo cual podría llegar a ayudar a adelgazar sin estar contando las calorías. Además, si se dejan de consumir
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azúcares y grasas contenidas en los productos precocinados, se reduce automáticamente la cantidad de calorías.
Primeras reglas
¿Querés comenzar a practicar eat clean? Lo primero es sacar de la alacena todo producto elaborado. Como segundo paso, despedite del azúcar y la harina blanca y poné arriba de todo de la lista de las compras, verdura, fruta y cereales integrales. Por ejemplo, un "desayuno eat clean", debería tener copos de avena remojados en leche y deberás respetar 5 colaciones ligeras a lo largo del día. En el caso de acostumbrar a hacer un desayuno tipo americano, se puede preparar una pasta de salmón con palta y acompañarla con pan de centeno.
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