Coloridas frutas, aromáticos hongos silvestres, incontables variedades de verduras, decenas de tipos de queso y, desde luego, el obligatorio jarabe de arce en todas sus variantes: el mercado Jean Talon de Montreal, Canadá, es lugar en el mundo para los que disfrutan de la buena comida y los alimentos diversos. No muy lejos, su competidor, el mercado de Atwater, no se le queda atrás.
Sobre todo los fines de semana, miles de personas se abren paso por los pasillos del mercado abarrotado. Para los turistas, el barrio Little Italy donde se encuentra JeanTalon es una de las muchas atracciones de la metrópoli más europea de Canadá. Para los habitantes de Montreal, es el símbolo de su modo de vivir. Pura cultura francesa gourmet, con opulencia, gran variedad y mucho placer.
Desde adentro
Todos los días, más de 300 campesinos, comerciantes y gastrónomos llenan de vida el mercado, uno de los más grandes de América del Norte. Se habla principalmente francés, como en el resto de la provincia de Québec. "Montreal es una ciudad muy mediterránea", dice Ruby, quien guía a turistas en excursiones en bicicleta por la ciudad. "Los estadounidenses caminan deprisa por las calles con vasos de café en la mano, pero nosotros nos sentamos cómodamente en el café", dice el guía.
Pero en ninguna parte la mentalidad mediterránea de los habitantes de Montreal se manifiesta más claramente que en el mercado.
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29 de septiembre de 2015
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